La maternidad y la paternidad dan lugar a cambios emocionales en los padres de los bebés, algo que se acentúa todavía más cuando el bebé presenta una discapacidad, ya que los padres de niños con discapacidad presentan mayores niveles de estrés y un mayor impacto en la relación familiar.
Respecto a los bebés con síndrome de Down, se ha constatado que el estado emocional de los padres afecta al desarrollo de sus bebés y al vínculo padre-hijo.
Por su parte, el masaje infantil, como herramienta de intervención realizada por los padres y supervisada por un profesional, ha demostrado que mejora la salud mental de los niños y su desarrollo en diferentes áreas. Sin embargo, no se han analizado los efectos que produce la práctica del masaje infantil en los propios padres cuando son ellos quienes lo realizan.
Esta #revisionfisiopediatrica está dirigida a un estudio cuyo objetivo ha sido evaluar los efectos de la terapia de masaje infantil en la aceptación, el compromiso y la conciencia de la influencia de los padres de bebés con síndrome de Down
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